Covirán Granada logra la permanencia en ACB tras imponerse a Joventut Badalona por 11 puntos y la derrota del Real Betis in extremis contra el Real Madrid. El conjunto nazarí protagonizó un toma y daca constante, y solo se ha despegado en el marcador en el último parcial, al mismo tiempo que el Real Madrid remontaba en el WiZink Center a un Betis que llevó la ventaja durante la mayor parte del encuentro.
Covirán Granada recibía la visita de Joventut Badalona en el último partido de la temporada –jornada 34 de la Liga Endesa-. El conjunto dirigido por Pablo Pin necesitaba ganar y que el Real Madrid cumpliese contra el Real Betis para lograr la permanencia en ACB.
El encuentro comenzó con falta de Ante Tomić sobre Youssou Ndoye en el salto inicial. El conjunto nazarí, necesitado de la victoria para, por lo menos, tener opciones de permanecer una temporada más en la ACB, empezó el primer cuarto muy errático. Cuando quedaban 4:38, el parcial era de 5-10, pero un triple de Guillem Vives (5-13) obligó a Pablo Pin a solicitar tiempo muerto.
Pese a que algunos errores no forzados persistían, los rojinegros empezaron a estar más acertados debajo del aro, recortaron distancias tras el tiempo muerto y el parcial del primer cuarto fue de 14-19.
La segunda manga empezó con un parcial de 0-2 en los dos primeros minutos, que rompió Thomas Bropleh con dos triples consecutivos y una canasta debajo del aro. En los segundos diez minutos, Joe Thomasson, ídolo de masas contra el Real Betis, vio canasta por primera vez en el encuentro desde la línea de tiros libres.
El reloj marcaba 4:34 para el descanso y Covirán Granada se puso por delante en el marcador (26-24) por primera vez desde el 5-4. Esto hizo que Carles Durán pidiese tiempo muerto. Thomasson, por fin, abrió la lata desde la línea de tres en su cuenta personal. Sin embargo, el conjunto catalán se colocó cuatro arriba a 1:12 del final del segundo cuarto y Pin emuló al entrenador de Joventut.
Finalmente, el encuentro se marchó al túnel de vestuarios con igualdad en el luminoso, 31-35, y un parcial de 17-16 en el segundo cuarto.
El inicio de la segunda mitad siguió la tónica de los dos primeros cuartos, en los que reinó la igualdad, sin ningún equipo que se despegase en el marcador, con un parcial de 7-7 en los primeros cincos minutos, que rompieron Kyle Guy, con dos triples, y Maye con una canasta de dos.
Con todo por decidirse, tanto en el Palacio como en el Wizink Center -entre el Real Madrid y el Real Betis-, el encuentro se fue al último cuarto con 47-52 en el luminoso (parcial de 16-17 en el 3Q).
Covirán Granada empezó la última manga con un parcial a favor de 12-1. El internacional español Joel Parra, con un triple, se encargó de romper la buena racha de los rojinegros. A falta de 4:27 para el final, cuando el conjunto rojinegro iba cinco arriba, el colegiado pitó antideportiva a favor de los catalanes. Al unísono, el Palacio de los Deportes de Granada rugía al conocer que Nigel Williams-Goss anotó un tiro para colocar al Real Madrid con un punto de ventaja -a falta de 6 segundos- tras estar por detrás durante prácticamente toda la segunda mitad.
El partido llegó al último minuto con un Real Madrid que ya se había impuesto en San Pablo por tan solo dos puntos, celebrado por todos los granadinos, y un Covirán Granada 10 arriba. Los últimos 25 segundos ya sabían a celebración para un conjunto nazarí que ha protegido su sueño hasta la jornada 34 de la ACB. Mate de Ndoye y bocina final como desencadenante de una fiesta en Granada para más de 8000 almas que nunca olvidarán esta noche.
Revista Chapman 
Deja una respuesta