El ATP Challenger 125 de Málaga concluyó este domingo con el triunfo de Ulises Blanchet por 6-4 y 6-4 ante el italiano Matteo Bellucci. La final, resuelta en dos sets y poco más de hora y media, fue un claro reflejo de un torneo que perdió el interés desde muy pronto, y del que solo trascendió el enésimo bochorno de Benoit Paire, dejándose perder ante Pedro Martínez en primera ronda.

Más allá de eso, los cuatro españoles del cuadro que se esperaba que pudieran animar al público malagueño hasta las últimas rondas cayeron en combate en los octavos de final. Todos eran cabezas de serie, y todos perdieron contra jugadores muy por debajo de ellos en ranking: Bautista con Harris, Carreño con Bellucci, Ramos con Nava y Martínez con Vavassori. Todos, excepto Pedro Martínez, perdieron además en dos sets y en partidos de poco voltaje; un batacazo para ellos, para el respetable, y para la Organización del Málaga Open.

Solamente Sergio Martos Gornes, pareja del italiano Bortolotti, salvó un poco la dignidad española en el torneo de Málaga, llegando por sorpresa a la semifinal de dobles, cayendo ante los eventuales finalistas, Harris y Smith.

Se espera que el torneo de Málaga pueda mantener la categoría de 125 (lo inmediatamente inferior a un ATP 250) a pesar de que esta edición no haya ido conforme a lo esperado. Le aguarda un duro trabajo a la Organización andaluza para poder reclutar a jugadores de mayor nivel para el próximo año y poder relanzar el campeonato en 2024.