BARCELONA | FC Barcelona y Covirán Granada se enfrentaban en la decimosegunda jornada de la Liga Endesa. Culés y rojinegros, en situaciones radicalmente diferentes, se iban a medir en un Palau Blaugrana a media entrada, con el Barça buscando la segunda plaza, y el Covirán separarse aún más del descenso que marcarían, pasara lo que pasara tras este partido, los mismo que antes: Palencia y Breogán.
Q1: 11-15
Los primeros diez minutos serían de toma de temperatura en toda regla. El Covirán, que salió con una energía desmedida en defensa, robó el balón una y otra vez a un Barça sin tino alguno y que no pasaba de los seis puntos tras ocho minutos. En ataque, los de Pablo Pin no conseguían acertar desde el perímetro, exceptuando un triple de Cheatham y otro de Kramer; pero el Barça no anotaría el primero hasta el final del cuarto, a manos de Abrines. Lideraba el Covirán 11-15 tras la primera manga.
Q2: 35-31 (24-16)
Como cabía esperar, el segundo cuarto traería consigo una mejoría en el acierto para el Barça. El cuadro de Roger Grimau, con un Jabari Parker más activo y Parra y Hernangómez siendo sólidos en la pintura, aprovecharía algunos errores del Covirán con el balón para recortar distancias. Konontsuk, con un triple, y Felicio, con un 2+1, dieron vida a Granada, pero Pin tuvo que parar el encuentro al ponerse el Barça a dos puntos. Los últimos cinco minutos serían un continuo intercambio de golpes en el que el Covirán Granada, naturalmente, no saldría bien parado ante la calidad individual del Barça. El cuadro catalán se iba al descanso mandando por cuatro puntos, con todo abierto para la segunda parte.
Q3: 54-54 (19-23)
Al regreso de vestuarios, el Barça pondría el turbo y conseguiría poner la ventaja en 8 puntos, en lo que parecía que sería el comienzo del finiquito para los culés, que empezaban a encontrar armonía en su juego. Sin embargo, Thomasson y Costa decidirían construir una remontada espectacular, con un parcial de 0-8 para empatar el partido. Una polémica antideportiva de Thomasson adelantaba al Barça, pero Kramer y Cheatham, con triples consecutivos, volvían a poner por delante al Covirán. En un «toma y daca» brutal en el Palau, el partido llegaba empatado al último cuarto.
Q4: 80-69 (26-15)
En los últimos diez minutos, la contienda fue un querer y no poder para un Covirán que tuvo que enfrentarse a una infinidad de diferencia de criterios arbitrales que le privaron de un triunfo que bien pudo merecer. Una antideportiva a Konontsuk y una técnica a Pin nada más comenzar el cuarto cuarto pudieron desequilibrar la balanza, pero la sangre no llegó al río por la falta de acierto culé, y los dos pares de triples de Cheatham y Costa que llegaron incluso a tener por delante a los granadinos en la última manga. El Barça, aprovechando dos malas posesiones de Covirán, cerró el partido a falta de dos minutos para terminar ganando 80-69.

