El Real Madrid derrota al Covirán Granada (76-83) en un partido de alto nivel que los de Chus Mateo no decidieron hasta los últimos cinco minutos del mismo. Los granadinistas, que perdían de quince en el segundo cuarto, llegaron a ir ganando de tres en el último. Campazzo, decisivo.

Covirán Granada y Real Madrid se veían las caras en la octava jornada de la Liga Endesa, en un encuentro disputado en un Palacio de los Deportes lleno hasta la bandera, con 8.014 espectadores. El cuadro de Pablo Pin, con solo una victoria en siete partidos, precisaba ganar para empezar a despegarse del pozo de la tabla. El Real Madrid, con un 14-0 en la temporada, y siendo un rodillo en cada pabellón pisado, se postulaba como clarísimo favorito ante un Covirán sin Thomasson. El Madrid dejaba fuera al ‘Chacho’ Rodríguez, a Yabusele y a Diagne.

Q1: 13-25

El inicio del partido sería un intercambio de golpes en los primeros compases, con el Covirán respondiendo a cada canasta del Real Madrid con otra de la misma cuantía. A partir del 10-10, los de Chus Mateo empezarían a soltarse para un parcial de 10-0 y Pablo Pin paraba el partido. El Real Madrid empezaba a poner la directa ante un Granada que lo apostaba todo al triple, y cerraba en 13-25 los primeros diez minutos.

Q2: 34-40 (21-15)

El Covirán acertaría en no claudicar del partido anímicamente en un día en el que el Real Madrid podía confiarse, y firmaría un segundo cuarto brillante. El cuadro rojinegro recortaría seis puntos al equipo madridista con los mejores minutos de la temporada de Germán Martínez, además de unos también atinadísimos Lluís Costa y Kwan Cheatham. El Real Madrid, haciendo más faltas de la cuenta y gestionando mal algunas posesiones, se marchaba al descanso con el partido lejos de estar decidido.

Q3: 65-62 (31-22)

Los de Pablo Pin volverían del descanso dispuestos a dar la campanada del año, y realizarían un tercer cuarto apoteósico. Sometiendo al Real Madrid en prácticamente todo momento, los locales, con unos Germán Martínez, Evaldas Kairys y David Kramer excelsos, daban la vuelta al partido antes del final de la tercera manga, con un Palacio de los Deportes encendido con el buen juego del Covirán.

Q4: 76-83 (11-21)

El Covirán seguiría intentando la machada hasta bien entrado el último cuarto. Llegaría a estar 70-67 con muy buenos minutos de Christian Díaz, pero el Madrid encadenaría doce puntos para sentenciar el partido. El conjunto blanco gestionaría bien las posesiones en los últimos minutos del encuentro para que no pasara mucho, y cerrarían la victoria por 76-83. Facundo Campazzo, con 21 puntos, fue el mejor madridista del partido.

Chus Mateo, satisfecho con la victoria

«Sabíamos que veníamos a un partido difícil, después de estar parados esta semana. Sabíamos que podíamos perder un poco de ritmo competitivo. Quizá hemos pensado que todo sería así durante todo el partido. Granada juega bien, sobre todo en ataque, es un equipo que tiene puntos. Así lo ha demostrado durante el partido. Ha sido capaz de volver después de nosotros tener una buena diferencia. Han anotado tiros de mérito, y nosotros hemos pensado que el partido estaba encarrilado demasiado pronto. Jugar contra Granada en su casa no es fácil. Hemos sido capaces de entender por dónde iba el juego. Creo que en la primera parte hemos abusado de algún tiro de tres más de lo que debíamos, pero hemos sido profundos, hemos entrado en la pintura y hemos tenido buen porcentaje de tiro al final. Los últimos cinco minutos han ido en la dirección que queríamos», comentaba Chus Mateo.

Pablo Pin, muy contento con la labor del equipo

«El primer período nuestro ha sido desacertado. Hemos encontrado buenos tiros pero no hemos anotado. El Madrid ha tenido todo lo contrario: mucho acierto. Hemos hablado de ser más agresivos, sobre todo en defensa, y no «sobreayudar». En ese segundo período hemos hecho unos minutos defensivos muy buenos. Han sido los mejores de la temporada a nivel defensivo. Nos hemos ido al descanso seis abajo pero con la sensación de estar haciéndolo bien. En el tercer período hemos seguido esa inercia, con mucho ritmo, anotando 31 puntos. Ellos también han metido canastas de mucho mérito. El partido estaba muy igualado, pero en los últimos cuatro o cinco minutos el Madrid, que no estaba en bonus, ha subido mucho el nivel defensivo. El Madrid en esas situaciones te castigan», comentaba Pin.

«No nos ha pesado el vernos por delante del Real Madrid a falta de siete minutos; nos hemos visto que estábamos haciendo muy buen baloncesto. El Real Madrid te lleva a un ritmo máximo. Ha habido una salida de Kramer en una jugada bastante buena, ha fallado y ellos han anotado. En el vestuario les he dado la enhorabuena por el esfuerzo; ya sabemos el camino que tenemos que llevar y pensar en los proximos partidos con ambición y tranquilidad. Tenemos que saber movernos en el barro y seguir trabajando al mismo nivel de esta semana», añadía el técnico del Granada, que esperará contar con Thomasson para la visita a Gran Canaria de la próxima semana.