El pívot lituano de 206 centímetros de altura, que tenía experiencia en España tras jugar en LEB Oro con Zunder Palencia durante la temporada 2018/19, empezó a entrenar con el Covirán Granada en verano con el objetivo de subir el nivel en los entrenamientos de cara al inicio de la Liga Endesa.
Realizó un mes de entrenamientos y llegó a debutar en amistosos de pretemporada, contra el Bayern de Múnich de Pablo Laso, Dreamland Gran Canaria y Valencia Basket. Tras esto, el pasado 22 de septiembre Fundación CB Granada lo fichó como parte de la plantilla oficial. El conjunto nazarí le hizo un contrato temporal de un mes, hasta finales de octubre, debido a un esguince en el tobillo que sufrió su compatriota Evaldas Kairys.
El 4 de octubre, sin embargo, Rokas Gustys sufrió una lesión muscular en el sóleo de su pierna derecha, fortuitamente durante un entrenamiento, que le ha hecho estar fuera de la pista casi todo su contrato.
Un mes después, el club granadino ha anunciado que Rokas Gustys deja de ser parte de la plantilla, haciendo hincapié en su «ejemplo de compromiso y profesionalidad durante los meses en los que ha estado en Granada».
Esta baja, desde luego, no será un problema para un Covirán Granada que, pese a los problemas en la defensa interior del comienzo de temporada, tiene muy bien cubierta la posición de ‘5’. Kairys ha demostrado una notable mejora en los últimos partidos y la mejor versión de Cristiano Felicio parece estar cerca, los dos pívots puros de la plantilla.
Además, el ala-pívot Artur Konontsuk, cada vez se le ve mejor sobre la pista, y Kwan Cheatham, también ala-pívot ha aterrizado de pie en Granada. El estadounidense, con pasaporte europeo, está siendo de los mejores este inicio de temporada, promediando casi 32 minutos por partido, 15,7 puntos, 3,5 rebotes y 1,3 asistencias.

